

Cuando nuestros esfuerzos no dan frutos, cuando las horas de estudio, trabajo y dedicación no se ven en los resultados finales, la frustración y el desánimo invade a nuestros jóvenes y población en general. Esto genera una sociedad desmotivada. No existe relación directa, en todos los casos entre los esfuerzos y el éxito. Un ciclo viciado, en donde hay muchos no triunfadores y muy pocos consiguiendo el exito